Pues, según esta noticia de El 9 Nou (11/5/07), hay personas capaces de llegar a tal extremo por el simple hecho de no gustarles el cartel de la fiesta mayor de Ripoll:

Parece mentira que aún quede gente que se lleve las manos a la cabeza por ver a un tipo leyendo.
Gràcies, Albertitu.