18.5.09

Arianne Martell

Es una práctica habitual. Primero, el anunciante se gasta una burrada en contratar a un famoso para que protagonice un anuncio de veinte segundos. Después, la productora debe subcontratar a un doble porque el famoso tiene quehaceres más importantes que perder el tiempo en el rodaje de un anuncio. Por supuesto, el famoso hace acto de presencia en el plató, rueda unos primeros planos y firma varios autógrafos. De hecho, se pasa más tiempo firmando autógrafos que rodando primeros planos. Y cuando los rueda, los creativos no pueden supervisarlo como es debido porque los hijos de los clientes les han quitado el sitio mientras Samuel Eto'o (vaya, se me ha escapado) está posando para los planos por los que le han pagado. Pero no todos: muchos de esos planos (planos generales o planos medios donde al famoso no se le ve la cara) los rodará un modelo colombiano.

Como digo, es una práctica habitual. Cuanto más cobra el famoso, en menos planos aparece. Esto es válido para una estrella del balompié, del cinematógrafo o de la canción ligera. Por ejemplo, Kylie Minos (es un seudónimo). En cierta ocasión, la famosa cantante australiana (creo que estoy dando demasiadas pistas) tuvo que rodar el anuncio de un coche. Por supuesto, hizo acto de presencia, rodó unos primeros planos y firmó varios autógrafos. O no. En realidad, los autógrafos los firmó mi amiga Arianne Martell (otro seudónimo). Como me contó, la gente se le acercaba con toda la ilusión y ¿quién era ella para quitársela?

En Los últimos días de Clark K., el protagonista dice algo parecido, aunque ahora no lo recuerdo muy bien. Es algo sobre dejar que la gente crea lo que quiere creer. En realidad, no estoy seguro de que lo diga, pero lo piensa. Porque Clark es el doble de Supermán en los planos de recurso: los de la compra en el súper, los de pasar la ITV, los de las reuniones de vecinos. Son esos planos del día a día que nunca serán portada del Daily Planet nuestro de cada día, pero que alguien los tiene que hacer.

Pura coincidencia o fruto del inconsciente, sólo puedo decir una cosa: Ari, eres mi musa.

3 comentarios:

ariadna dijo...

al, tú eres mi superhéroe :)

Alberto Ramos dijo...

Que no te oiga el Capitán Calzoncillo. ;-)

Anónimo dijo...

Miralo bien de quien se trata.
Y tranquilo nene, que no es nada de broma. ¿Quieres perder el pelo y tener una cara de setenteñero en 15 dias? Ponme a la prueba