Coser y cantar no es fácil. Para coser hay que saber coser. Para cantar no hay que saber cantar. Para cantar bien, sí. No para cantar y punto. O ganchillo. Pero cantar bien es otra cosa. Coser i cantar, dicen unos hombres de Mallorca llamados Antònia Font. Para ellos, cantar es bufar i fer ampolles: soplar y hacer botellas, como las que hacían otros hombres de Mallorca cuando, de camino a las Coves del Drac, nos dejamos olvidado a un amigo. Aunque soplar y hacer botellas tampoco me parece fácil (otra cosa es que te hagan soplar con varias botellas encima). No más fácil que coser o cantar bien. Podría hablar de la generación Sobrasada, qué merendilla. Pero no soy crítico literario. Por eso tampoco hablaré de El misteri de l'amor, novela prima del guía espiritual de los señores de Font. Por eso y porque aún no la he empezado (por el final). Apenas he leído el epígrafe que la preludia: "Tranquilos, vengo del futuro para traeros algo mejor." De todos los anuncios del mundo, ha tenido que acordarse de éste. El pasado me persigue, como Terminator. Y como el cuento 210, que ya llegará.
Esta entrada tampoco tiene concepto.
creo que me he perdido, ¿de qué no querías hablar? :)
ResponderEliminarDe mi libro.
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