Algún día hablaré de "El séptimo sello", una breve pieza teatral de Woody Allen que me persigue con persistencia desde mucho antes de haberla leído. Está incluida en el libro Cómo acabar de una vez por todas con la cultura, incluido a su vez en el volumen Cuentos sin plumas.
La semana pasada estaba en el ferrocatalán leyendo uno de los relatos del libro Sin plumas (también incluido en Cuentos sin plumas). Tras acabarlo, me planteé la posibilidad de empezar el siguiente, un cuento sobre Van Gogh en un universo alternativo: "Si los impresionistas hubieran sido dentistas (Una fantasía que explora la transposición de temperamento)". Al final, y como faltaba poco para mi parada, opté por no empezarlo. Poco después, al bajarme del tren y encaminarme hacia la salida de la estación, me topé por vez primera con el cartel de la última película de Woody Allen. A los que no lo hayáis visto, sólo os diré una cosa: si Van Gogh levantara la cabeza no vacilaría en adscribirse al movimiento surrealista, escuela navaja en el ojo. (Sólo espero que la película sea muchísimo mejor; o, por lo menos, tan genial como el cuento.)
Por cierto, cada vez que veo los nenúfares de Monet me retrotraigo proustianamente a la sala de espera del dentista al que acudía de pequeño. También me acuerdo de City, de Alessandro Baricco.
Esta mañana zapeo con el desayuno. En la primera de TVE están entrevistando a Jordi Hereu, alcalde alcaldable de Barcelona. En la 2 hay un reportaje sobre Sicilia. TV3 emite otra entrevista a Jordi Hereu. Y el 33, otro reportaje sobre Sicilia.
Había empezado a leer Emaús, de Baricco. Poco después, y como no suelo leer los libros de un tirón, fui a coger el primer punto de libro que encontré por casa.
Estoy seguro de que el modelo del punto de libro es pariente cercano de Baricco. De hecho, está leyendo un libro en italiano (esto no prueba nada, pero tampoco lo desmiente).
"La noche pasada soñé que Murcia iba a desaparecer", canta Sr. Chinarro en la gloriosa "Babieca". Y la semana pasada, en un festival de Murcia llamado SOS, Patti Smith le pidió que la acompañara a la guitarra. Pero ésta es otra historia, y ahora no toca.
VÍDEO: © Los créditos aparecen en el minuto 5:55.
en mi libro de Emaús descansa el mismo punto de libro (por si lo quieres sumar a tu lista de coincidencias del día)... :)
ResponderEliminar¡Anda!
ResponderEliminarEn el cuento (u obra de teatro) Muerte (una comedia) se encuentra el germen de la película Sombras y niebla, del propio Allen. Por cierto, me gusta su medianoche en París.
ResponderEliminarTengo ganas de verla.
ResponderEliminaryo también :)
ResponderEliminar:-)
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