No conozco a Envasadora47. No sé si es una mujer, una máquina o un ciborg. Como no tengo intención de reclamar nada, es probable que no lo averigüe nunca. Y mejor así: un exceso de información puede acabar con la magia.
De todas maneras, supongamos que se trata de una persona. ¿No os parecería, en tal caso, una idea sumamente perversa? ¿Y no creéis que, en esta época de reformas laborales, podría extenderse fácilmente a otros sectores? Por ejemplo, uno que me pilla cerca.
Imaginaos que estáis leyendo plácidamente el periódico y, al pasar página, os encontráis un anuncio con esta etiqueta (o cupón recortable, como en los viejos tiempos):
En caso de reclamación
adjunten esta etiqueta
También podría incluir esta otra, en previsión de que el motivo de la reclamación fuera más estético que redaccional:
En caso de reclamación
adjunten esta etiqueta
Desde luego, esta iniciativa se puede aplicar a otros sectores, además de la publicidad y los tomates cherry. Por ejemplo, a las compañías eléctricas.
Post postum.* Por la misma razón expuesta en el primer párrafo, tampoco quiero averiguar el significado de esta lona.
* Dedicado a Claudia.
oye, pues sería muy práctico para denunciar faltas de ortografía... ¡contacto directo con el perpetrador!
ResponderEliminarEn estos casos, la culpa suele ser del director de arte, por usar tipografías sin acento.
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