1.9.07

Cuentos bonsái (o bonsáis)

Lo leo en El País de hoy (y lo escribe Winston Manrique Sabogal, en el suplemento Babelia):

De fronteras movedizas, lo que sí rodea a este género es una alegre comparsa de nombres que encabezan microrrelato, minicuento y minificciones, mientras le siguen minihistorias, cuentines, cuentos cuánticos, nanocuentos, cuentos bonsái…

O sea, que mis bonsáis les están pisando los talones a los nanocuentos… ¡Vamos, chiquitines! ¡A por ellos!

12 comentarios:

  1. Gracias, Ariadna, pero no los aúpes demasiado, que se crecen.

    Y gracias a Nata por presentarme a Jean de Plantavit de La Pause.

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  2. De nada, Al. Fue un placer ofrecerte un negociador a la altura de las circunstancias.

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  3. En ocasiones veo naturaleza muerta y me quedo como el título.

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  4. Ah, gracias, Quim. Me has salvado la vida.

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  5. Una adivinanza: ¿qué película empieza como Los santos inocentes, sigue como La amenaza fantasma, continúa como Una casa de locos y Lucía el sexo (con Bebe en el papel de Najwa Nimri), y se acaba convirtiendo en una versión extendida de La culpa del alpinista (corto de Daniel Sánchez Arévalo sobre una idea de Julio Medem)?

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  6. elegí un mal día para ver esa película ;)

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  7. No, al revés: elegí una mala película para ver ese día.

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  8. Dato anodino: en las dos últimas pelis de ficción de Medem aparece Antonio Vega cantando una canción que no es suya.

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  9. Nadie más cree que Julio Medem se ha vuelto un cursi insoportable?

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  10. Creo que la tuya es una creencia compartida.

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