Lo saben hasta en Esplugues: Woody Allen se encuentra en Barcelona rodando, no su próxima película (que ya la ha rodado), sino la siguiente. Pero ¿quién ha dicho que el filme vaya a estar ambientado en esa ciudad que los periodistas llaman condal para no tener que repetir la palabra Barcelona?
De acuerdo, Woody Allen dijo que la cinta (otra palabra que les encanta a los periodistas) iba a ser "una carta de amor a Barcelona". Pero, claro, lo dijo bajo coacción: a ver quién es el guapo que se pone a afirmar delante de trescientos políticos que él, en realidad, lo que pretende con su película es declararse a Los Ángeles; lo habrían mandado derechito a la plaza dels Àngels.
Los westerns de Sergio Leone estaban rodados en Almería, pero transcurrían en el Lejano Oeste. George Lucas rodó algún plano de El ataque de los clones en Sevilla, pero la acción tenía lugar en un ídem muy, muy lejano. Y El perfume se rodó en Barcelona, pero la historia se desarrollaba en París y alrededores.
De hecho, algo me dice que el cineasta neoyorquino (lo pongo para no volver a repetir "Woody Allen") va a rodar algunos planos en el barrio de Gràcia, cuna de la risa catalana. Quizás alguna de las escenas vaya a estar ambientada en un restaurante libanés, o en la cola de un cine de esos que proyectan filmes europeos en versión original mientras dos personajes discuten por culpa de McLuhan. En cualquier caso, la cosa no estará sucediendo en Barcelona.
Bienvenido Mr. Allen...
ResponderEliminarParece que Mr. Allen no conoce la película, porque habría pasado de largo.
ResponderEliminarHuy, un espóiler.
me ha causado mucha gracia su post.
ResponderEliminarJajaja "Gracia cuna de la risa". Por cierto, la foto, esa no es la calle... sí hombre... el italiano ese, el de Nabucco... ahora no me sale, en fin.
ResponderEliminarZoe, gracias, valga la redundancia.
ResponderEliminarSobreunanube, supongo te refieres a Giuseppe Torrijos, ¿no?
es una casposa iniciativa más del ayuntamiento para hacer que woody se sienta como en casa...
ResponderEliminarAlmodóvar rodó un par de escenas de La mala educación en Molins de Rei, y no me suena que mi antiguo instituto lo nombrara bachiller honoris causa, ni nada parecido.
ResponderEliminarJajaja, ¡qué graaande!
ResponderEliminarBuf, leo Woody Allen y me canso. Me ha tocado perseguirle (a quién no?), y he ido de la Barceloneta a Las Ramblas, pasando por Berverdi Hils. ¿Cómo es que no me fijé en el cartel?
ResponderEliminarEn esta ciudad, eres el único capaz de aguantar la mirada.
Te envidio.
Es por mi tendencia a confundir las calles, que tengo que ir fijándome continuamente en las placas.
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