Apartheid



Anoche soñé un mundo donde las llamas y los flamencos se bañaban juntos.

Breve muestra no representativa de publicidad boliviana




Y una muestra, menos representativa aún, de los profesionales del sector:

17.3.07

Por una buena causa


Siempre he creído que disputar un partido de fútbol contra la droga es como celebrar una misa contra el sexo. Convencerá a los convencidos, y punto.

Para combatir a la droga, quizás haya que hacerlo de forma más segmentada y desde un terreno más cercano. Por ejemplo, con una esnifada contra la marihuana. En cuanto a los del fútbol, podrían montar un partido contra el waterpolo.

Del mismo modo, creo que quien tendría que encargarse de luchar contra el reguetón son los propios músicos. Espero que cunda el ejemplo.

Este post está dedicado a otro festival, al que tengo un poco abandonado últimamente.

Valga la redundancia


Y no lo comento por no incurrir en otra ídem.

16.3.07

Literatura de pared


Las callecitas de Buenos Aires están llenas de estarcidos (¿se dice asín?). La casa del amigo Luponce está llena de libros.

En ocasiones, se producen extrañas coincidencias entre ambos mundos.

(Por cierto, espero que te animes a regalarnos otra de tus reseñas literarias.)

14.3.07

El desasosiego del turista

Encontrar a la auténtica abuela boliviana de Litoral y que no se deje fotografiar.

Y que me toque la (bueno, ejem)


Tiene una explicación perfectamente racional, pero no la voy a dar (al menos, de momento).

No es para menos


En cierta ocasión ya hablé los orgullos patrios.*

* Para una óptima visualización, recomiendo hacer click sobre la foto.

Yo agasajo, tú agasajas...


Confieso que hoy me han hecho un regalo bastante más original.

A He-Man pongo por testigo


-¿Te gusta leer?
-Depende.
-Estupendo, porque aquí tengo una revista, Atalaya de Grayskull, que te va a gustar.
-Ah, ¿sí?
-Sí, claro. Tú léetela y ya me dirás qué te parece.
-Bueno, no sé... ¿Seguro que no sois del Círculo de Lectores?

4.3.07

Gastronomía razonable

Durante mi estancia en la capital chilena, me he hecho un nada firme propósito: descubrir si existe la tarta de Santiago de chile.